La actividad se lleva a cabo gracias a los lineamientos expuestos en las tesis de dos de nuestros estudiantes de doctorado: Diego Valdivieso y Diego Quizanga, y el apoyo de Ingeniería UC y DICTUC.
Con el objetivo de demostrar que las edificaciones de madera son seguras y pueden resistir movimientos telúricos de gran envergadura, investigadores del Centro Nacional de Excelencia para la Industria de la Madera (CENAMAD) realizaron los primeros de una serie de ensayos de aislación sísmica, junto a la Facultad de Ingeniería de la Pontifícia Universidad Católica y la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la misma casa de estudios, DICTUC.
Los ensayos experimentales forman parte de estudios del comportamiento sísmico en estructuras de tipo marco plataforma y la interacción de los muros en dos direcciones, probando un nuevo tipo de losas y un sistema de aislamiento sísmico resistente al impacto lateral.
El ensayo propiamente tal consistió en una estructura de madera de entramado ligero apoyada sobre aisladores sísmicos, en particular, un tipo de aislador de fricción patentado por el profesor José Luis Almazán y el alumno de doctorado Diego Quizanga.
De este modo, a través de una mesa vibradora, se indujeron varios tipos de movimientos en la estructura, los cuales imitaron la fuerza telúrica de sismos ocurridos en California, Estados Unidos; Kobe, Japón; y Concepción en el año 2010. Además, esta mesa estaba conectada a otros instrumentos que permitieron medir la dirección correspondiente, deformación y torsión a la que fue sometida la edificación.
El profesor e investigador principal CENAMAD José Luis Almazán, aclara que lo que se quiere hacer con este ensayo es “entender de mejor manera cuál es el comportamiento real de una estructura de madera, porque esto lo que está haciendo es mostrar cómo se comporta la interacción entre dos pisos”.
Dentro de los ensayos también se estudiaron las conexiones entre los muros perpendiculares, consiguiendo un comportamiento acoplado que permita reducir la cantidad de herrajes y conexiones en las edificaciones, lo que ayudaría a reducir el tiempo de trabajo en una obra.
Nicol López, asistente de proyectos CENAMAD que participa en los ensayos, explica que “este concepto de industrialización permite reducir el tiempo de ejecución en la obra, también permite reducir errores que pueden suceder en la manufactura del edificio. (...) Ese es el camino que estamos siguiendo”.
Dentro de las diversas colaboraciones que hicieron posible la realización de estos ensayos destaca el aporte técnico y financiero realizado por la empresa Adyacente S.A, a través de su representante legal, el ingeniero estructural Sebastián Cárcamo. Su experiencia en el área y con la materialidad fueron un gran apoyo para los investigadores, sirviendo para orientar los ensayos hacia la resolución de problemáticas de gran relevancia en la industria actualmente.
La segunda fase de los ensayos se realizará sobre la misma estructura de entramado ligero, pero esta vez no contará con aisladores sísmicos, sino que la estructura quedará fija a una superficie, para poder observar el comportamiento de una edificación de madera por sí sola ante movimientos telúricos.
Así mismo, otros investigadores se encuentran trabajando en ensayos y estudios de otros proyectos del centro, abarcando una gran variedad de aristas de la construcción sustentable con madera, el área forestal chilena y el desarrollo de bioproductos provenientes de la madera. Estos avances se comparten a través de nuestra web, nuestras redes sociales de Linkedin y Twitter, y nuestro newsletter semanal al que cualquier interesado puede suscribirse por medio de nuestra página web.
