Un artículo publicado en Ciencia & Investigación Forestal contó con la participación de Verónica Loewe, investigadora de CENAMAD e INFOR. El estudio plantea la diversificación como estrategia clave para superar la alta concentración del modelo forestal chileno y avanzar hacia un desarrollo más productivo, inclusivo y ambientalmente sostenible.

Publicado en diciembre de 2024, el artículo “Diversificación forestal, perspectivas socioeconómicas y ambientales para la realidad chilena” analiza cómo el modelo actual, basado principalmente en Pinus radiata y Eucalyptus spp. (92,3% de las plantaciones), ha permitido que la industria forestal alcance exportaciones por más de US$ 6.600 millones en 2022 y se consolide como la segunda actividad productiva del país. Sin embargo, este crecimiento se ha concentrado en pocas especies, regiones y grandes empresas, lo que ha limitado la distribución de beneficios sociales y ha generado conflictos.
Un modelo en debate
El estudio, con participación de Verónica Loewe (CENAMAD-INFOR), señala que este modelo de plantaciones puras industriales a gran escala no ha sido eficiente para lograr un desarrollo integral del sector. Sus beneficios económicos y tecnológicos se concentran en pocos actores, mientras que los pequeños y medianos propietarios —que poseen entre 2 y 4 millones de hectáreas— han quedado al margen. Al mismo tiempo, el bosque nativo continúa en estado de degradación por prácticas históricas y falta de manejo sustentable.
La propuesta de diversificación forestal no busca reemplazar el modelo existente, sino complementarlo con nuevas alternativas que equilibren rentabilidad, equidad social y protección ambiental.
Más allá del monocultivo
Los autores plantean avanzar hacia un modelo más diverso, incorporando especies no tradicionales, fomentando la arboricultura, impulsando la agroforestería y promoviendo el manejo sustentable del bosque nativo.
Especies no tradicionales: amplían la base productiva, reducen vulnerabilidad frente a plagas y abren acceso a mercados de nicho con maderas de alto valor.
Agroforestería: combina agricultura, ganadería y árboles en un mismo predio, generando ingresos diversificados y servicios ecosistémicos como regulación hídrica o protección de suelos.
Arboricultura: orientada al cultivo de árboles de alto valor en condiciones controladas, permite mejorar la rentabilidad de pequeños y medianos productores.
Manejo de bosque nativo: genera ingresos a partir de productos madereros, no madereros o servicios como el ecoturismo, a la vez que protege la biodiversidad y el agua.
Beneficios sociales y ambientales
La diversificación forestal no solo disminuye riesgos productivos: también mejora la funcionalidad ecológica de los paisajes, reduce la presión sobre el bosque nativo y aumenta la resiliencia frente a cambios de mercado o crisis climáticas. Además, abre nuevas oportunidades para pequeños y medianos propietarios, tradicionalmente excluidos del modelo forestal dominante.
Los obstáculos de la diversificación
Pese a sus ventajas, el artículo advierte que la diversificación enfrenta barreras relevantes: falta de incentivos económicos, escasa difusión de experiencias nacionales exitosas y necesidad de fortalecer la transferencia tecnológica hacia propietarios y comunidades rurales.
Otro aspecto clave es la asociatividad, ya que muchos pequeños productores carecen de recursos para implementar proyectos de forma individual. La organización colectiva permitiría compartir conocimientos, alcanzar economías de escala y acceder a mejores canales de comercialización.
Hacia un nuevo modelo forestal
El estudio concluye que la diversificación forestal es una oportunidad estratégica para avanzar hacia un desarrollo más inclusivo, socialmente justo, económicamente viable y ambientalmente sostenible.
Más que un cambio productivo, representa una transición hacia un modelo multipropósito, capaz de equilibrar los intereses económicos con la protección del bosque nativo y una mayor participación de pequeños y medianos propietarios y PYMEs. Una visión plenamente alineada con los ejes estratégicos de CENAMAD, que promueven la sustentabilidad y la equidad en la industria forestal chilena.
El artículo fue desarrollado por Verónica Loewe Muñoz (INFOR / CENAMAD) y Sergio Lisoni Cornejo (consultor privado), y publicado en Ciencia & Investigación Forestal (Vol. 30, N°3, diciembre 2024).