
Un estudio publicado en Frontiers in Forests and Global Change contó con la participación de investigadores de CENAMAD de la Universidad de La Frontera: Andrés Fuentes-Ramírez, Rodrigo Vargas-Gaete, Paola Arroyo-Vargas y Bernardita Díaz-Mons. La investigación reveló que plántulas de Araucaria araucana pueden sobrevivir y crecer exitosamente en bosques quemados incluso sin protección adicional y expuestas a la ganadería, mostrando una capacidad de resiliencia notable luego de incendios de alta severidad y presión de ganado.
La Araucaria araucana es una conífera endémica de Chile y Argentina, declarada Monumento Natural en Chile y catalogada como “En Peligro” por la UICN. Además de su importancia ecológica como formadora de bosques primarios en la Cordillera de Los Andres, posee un profundo valor cultural para las comunidades Pehuenche, que la consideran parte de su identidad.
Sin embargo, el cambio climático, el aumento de la frecuencia y severidad de los incendios forestales, la presión del ganado y la recolección intensiva de semillas pueden poner en riesgo su regeneración natural y la continuidad de estos ecosistemas.
El estudio en terreno
Publicado en agosto de 2025, el artículo “Resilience beyond expectations: seedling performance under fire and grazing pressure in old-growth Andean Araucaria araucana forests” evaluó, durante cinco años, la supervivencia y el crecimiento de 200 plántulas de araucaria plantadas en la Reserva Nacional China Muerta (Región de La Araucanía), la cual fue gravemente afectada por un incendio de gran magnitud en 2015.
Las plántulas se establecieron en sitios con distinta severidad de fuego (moderada y alta) y bajo cuatro condiciones:
- con o sin “legados biológicos” (protección de troncos caídos, árboles muertos en pie, sotobosque remanente),
- y con o sin exclusión de ganado.
El objetivo fue determinar cómo estos factores influyen en la capacidad de la araucaria para sobrevivir y crecer en ambientes degradados por el fuego.
Resultados principales
Alta supervivencia general: tras cinco años de evaluación sistemática, la tasa promedio de supervivencia fue cercana al 80%, sin diferencias significativas entre sitios de distinta severidad o condiciones de manejo.
Efecto de legados biológicos: en términos de supervivencia, su influencia fue en general positiva pero no significativa. En crecimiento en altura, sí se observó un efecto positivo y significativo, especialmente en áreas de alta severidad, aunque este efecto fue temporal y más marcado durante los primeros dos años de monitoreo.
Crecimiento en número de brotes: ni los legados biológicos ni la exclusión de ganado mostraron efectos positivos en el número de nuevos brotes que se desarrollaron en el periodo de estudio.
Resiliencia frente a la adversidad: incluso sin la protección de legados biológicos o con presencia de ganado, las plántulas de Araucaria araucana mostraron una notable capacidad de sobrevivir y crecer.
Factores individuales: las características propias de la especie son más determinantes para la supervivencia que las condiciones del sitio, lo que confirma el alto potencial adaptativo de la especie.
Implicancias para la restauración
Los hallazgos indican que la araucaria puede establecerse en áreas quemadas sin requerir intervenciones complejas, lo que facilita su incorporación en planes de restauración a gran escala. Sin embargo, los autores subrayan que prácticas como mantener legados biológicos y controlar la presencia de ganado pueden favorecer un crecimiento más robusto en etapas tempranas y aumentar las probabilidades de éxito en el largo plazo.
Además, recomiendan priorizar la restauración en zonas de alta severidad, donde la regeneración natural es mínima y donde este tipo de estrategias puede marcar una diferencia decisiva para la conservación de la especie.
Relación con CENAMAD
Este estudio se enmarca en los esfuerzos de CENAMAD por desarrollar soluciones innovadoras para la restauración de bosques afectados por incendios forestales, en coherencia con sus líneas de investigación sobre sustentabilidad y resiliencia forestal. Asimismo, forma parte de los resultados asociados al proyecto PINC230004 “Transferencia horizontal de microorganismos: estrategia eco-biotecnológica para restaurar bosques quemados”, que contempla tesis de postgrado, publicaciones científicas y el desarrollo de protocolos aplicables a la restauración post-incendio en bosques naturales.
La investigación fue liderada por Bernardita Díaz-Mons (tesis de maestría) y contó con la participación de Andrés Fuentes-Ramírez (CENAMAD/UFRO), Paola Arroyo-Vargas (CENAMAD/UFRO) y Rodrigo Vargas-Gaete (CENAMAD/UFRO), junto a colaboradores nacionales e internacionales.